Mi hijo perdió el año escolar
Mi hijo perdió el año escolar. Enterarse de que su hijo reprobó el año podría resultar angustiante, difícil de tramitar y, en algunos casos, frustra la relación como padres y las expectativas que tiene de su hijo, aseguran los expertos.
- QUÉ HACER SI SU HIJO ES DE LOS QUE PERDIÓ EL AÑO
- Meu filho perdeu o ano escolar
- ¿Su hijo perdió el año? Sepa cómo asumir esa situación
¿Qué es lo que se perdió? Mi hijo perdió el año escolar
“La primera clave es entender que el año no se perdió, en estricto sentido, lo que pasa es que el estudiante se va a retrasar con respecto a sus compañeros y si se hace este cambio en el lenguaje, se podrá comprender que esa experiencia traumática va a reforzar la resiliencia en los niños y en sus familias, que es la capacidad de recoger todo lo bueno de cualquier situación traumática de la vida y a su vez fortalecer la tolerancia a la frustración y a la crisis, que sin duda alguna será una herramienta para toda su vida”.
Mi hijo perdió el año escolar. La reacción de los padres
Cuando nuestros hijos dejan el año escolar, habrá muchas caras largas y padres que se sentirán decepcionados porque en el colegio les dirán que su hijo perdió el año. Pero ojo: varios expertos coinciden en señalar que detrás de todo fracaso escolar siempre se esconde una poderosa razón y que ésta puede ir desde métodos equivocados de enseñanza y un ambiente familiar conflictivo, hasta problemas auditivos o visuales en el menor. Los especialistas sostienen que desconocer esas posibilidades y asumir posiciones inflexibles pueden hacer que los niños desarrollen verdadera fobia hacia las aulas.
Por lo regular, la reacción de los padres está acompañada de frases como no te volveré a matricular en el colegio, es que acaso eres un tonto , me hiciste perder mucho dinero o estás castigado y no saldrás en estas vacaciones .
Pero casi nunca asumen una posición comprensiva que permita explorar los motivos y encontrar alternativas para superar los problemas de sus hijos.
Según los sicólogos, los padres le dan mucha importancia al intelecto y por eso experimentan sentimientos de frustración y decepción frente a esta situación. Además acostumbran a identificar la pérdida de un año como un fracaso.
Los expertos aseguran que perder no siempre es un aspecto negativo. Mi hijo perdió el año escolar
Para los niños, este hecho se constituye en sinónimo de amenazas, peligros interiores y sufrimientos. Posiblemente muchos no puedan superar esta derrota y opten por no volver a pisar en su vida una escuela.
Por qué fracasan? Generalmente los padres se preguntan: Pero si mi hijo es tan inteligente por qué perdió el año?.
¿Por qué mi hijo dejo el año escolar?
El sicólogo español Baudilio Martínez sostiene que todos los niños suelen tener regresiones periódicas, y es muy corriente que pasen por desorganizaciones transitorias que le hacen más dependiente, ruidoso, agresivo y menos receptivo a las exigencias escolares. Por ello, indica Martínez, es normal que en determinados momentos del desarrollo infantil se presenten calificaciones deficientes y problemas en determinadas áreas.
Sin embargo, otros orientadores aseguran que el origen de la mayoría de los casos está en el establecimiento educativo.
Las dificultades de los niños se relacionan, generalmente, con los métodos de enseñanza. La escuela no continúa el proceso natural de aprendizaje que el niño venía empleando para conocer el mundo y por eso pierde el interés cuando no entiende la utilidad de lo que su profesora le enseña. De ahí que centre su foco de atención en las actividades que él considera importantes y no en las que el colegio le proporciona.
Otro motivo puede obedecer a las dificultades que surgen en el vínculo afectivo entre profesores y alumnos.
Otras razones por la que mi hijo perdió el año escolar
En ese mismo sentido, el fracaso escolar se puede presentar porque muchos pequeños no reciben buenas bases desde el comienzo del ciclo escolar y porque hay niños que no tienen ni la edad cronológica ni mental para determinados grados.
Pero el ambiente familiar también es determinante. La desintegración familiar, padres sobreprotectores o muy exigentes, la falta de afecto, el desinterés absoluto de los padres por los progresos o dificultades del menor o la amenaza permanente de disgregación de la pareja pueden incidir notablemente en el rendimiento escolar Según los sicólogos, un ambiente familiar conflictivo puede sumergir al niño en un estado de incertidumbre, confusión y angustia.
Pero también hay causas ocultas. Problemas auditivos y visuales; trastornos emocionales; dificultades en el lenguaje oral, escrito, matemático y de comprensión, que impiden el desarrollo normal de las actividades escolares.
Se recomienda mantener la calma y el control de las emociones, no recurrir a los insultos, agresiones verbales, violencia psicológica o física.
Ojo a estos síntomas Dicen que es mejor evitar que lamentar. Pues bien, existen unos indicadores que le pueden ayudar a los padres a detectar a tiempo el fracaso escolar.
Sin embargo, hay que tener en cuenta que todas las situaciones, circunstancia y síntomas son diferentes.
Un niño que no afronta con éxito las actividades escolares no expresa sufrimiento y busca todo tipo de justificaciones y razones, en general no adecuadas a la realidad, para disimular su bajo rendimiento escolar.
No parece tener conciencia de sus dificultades, no sabe incluso las tareas o trabajos que ha de realizar ni cómo debe realizarlos.
Además, es incapaz de informar sobre sus actividades y no intenta buscar soluciones, ni demanda ayuda, y, si la tiene, no la acepta, repitiendo actitudes negativistas frente a cualquier tipo de requerimiento que le proponga el establecimiento educativo.
Esta clase de niños expresan sufrimiento por su rendimiento, piden ayuda y se muestran receptivos frente a la ayuda que se le ofrece.
También es un indicador el hecho de que presenten pequeñas mejorías junto con recaídas, es decir, cuando se advierte que el síntoma no está estructurado rígidamente, sino que cede en determinados momentos.
¿Qué se debe hacer? Si, mi hijo perdió el año escolar
Los expertos coinciden en señalar que detrás de todo fracaso escolar siempre se esconde una poderosa razón. Desconocer esto y asumir posiciones inflexibles y agresivas pueden llevar a que el niño se aleje definitivamente de la vida escolar.
Generalmente lo que le preocupa al niño es la reacción de sus padres y no el hecho mismo de haber reprobado el curso. Esto puede llevar a que los niños no se responsabilicen de sus actos ni de sus deberes -El primer paso que se debe dar es averiguar los motivos, teniendo en cuenta que cada situación es diferente. El diálogo y la comprensión facilitarán este proceso. Siempre se les debe hacer ver que sus problemas sí tienen solución.
Mi actitud ante la perdida del año escolar de mi hijo
-Los reproches, censuras y castigos excesivos a veces sólo sirven para reforzar la inseguridad en el niño. Frases como perdí el dinero en ti, ya no habrá regalo de Navidad o no te volveré a matricular en el colegio no ocasionan compromiso en el niño sino mayor resistencia.
-Si los niños encuentran apoyo y respaldo, seguramente convertirán el fracaso en un éxito. Los padres deben ser conscientes de que algunos niños requieren de mayor tiempo para aprender. Incluso, los sicólogos indican que hay niños que necesitan pasar por la experiencia del fracaso para madurar.
-La actitud ante el niño que fracasa no debe enmarcarse dentro de la severidad total o la tolerancia absoluta. No existe nada más perjudicial que la ausencia de normas de conducta o un sistema estrecho que asfixie el niño.
– Una de las condiciones básicas para que el niño pueda enfrentar con éxito las dificultades es reforzar su autoestima. Si a un niño se le reconocen sus habilidades, seguramente que entenderá mejor lo que se le dificulta.
– El apoyo al niño no debe basarse en halagos o alabanzas falsas e infundadas. El estímulo debe centrarse en logros reales.
Encontrar la verdad tras la perdida de mi hijo del año escolar
– Las actividades lúdicas pueden ayudar a controlar inseguridades, temores y reacciones agresivas. Además les permite entender que el éxito no se consigue en la primera tentativa.
-Cuando la repitencia o fracaso es constante, se recomienda una evaluación integral del ambiente familiar y escolar que rodea al estudiante, con el propósito de conocer las causas reales y evitar la deserción escolar definitiva.
¿Cómo evitar un futuro fracaso del año escolar de mi hijo?
– Un fracaso escolar futuro se puede evitar si el niño encuentra apoyo en sus padres. Siempre se debe tener en cuenta hasta la mínima dificultad que se observe en el pequeño. Una miopía puede ocasionar el fracaso escolar.
Es fundamental que encuentren apoyo en sus padres para realizar las tareas escolares, pero sin que estos asuman las funciones del profesor. Crear hábitos de estudio, buscar técnicas de aprendizaje o enseñarles a distribuir el tiempo, pueden evitar futuros dolores de cabeza.
Ventajas de repetir curso, si mi hijo perdió el año escolar
Se ha demostrado que repetir curso no es una medida eficaz para mejorar el rendimiento académico de los alumnos. Sin embargo, una práctica bastante extendida en los sistemas educativos. Para que la repetición tenga un efecto positivo, es necesario que el estudiante reciba medidas adicionales de refuerzo que le ayuden a paliar las dificultades que le impidieron la promoción.
La clave del éxito radica en prepararle un plan de apoyo individualizado. De lo contrario, repetir curso supone un castigo, en el que el único perjudicado es el alumno que perderá un año de su vida haciendo lo mismo que el curso anterior, normalmente sin motivación extra.
El número de repetidores crece cada año en todas las escuelas. El grupo de estudiantes que no promociona de curso aumenta de forma significativa en secundaria. La conveniencia de permanecer un año más en el mismo curso escolar ha sido motivo de polémica entre los distintos participantes del ámbito educativo.
Los principales argumentos en contra de la repetición son los siguientes:
– Se ha demostrado que el rendimiento del alumnado que repite y los resultados académicos son inferiores a los necesarios para promocionar al siguiente nivel.
– Los alumnos repetidores tienden a infravalorarse y muestran una actitud menos favorable hacia la escuela.
– Los docentes no prestan más ayuda a los alumnos que no han promocionado de curso.
– Los resultados del alumno repetidor pueden ser superiores a los logrados la primera vez que realizó el curso. Sin embargo, no son estables en el tiempo y vuelven a bajar dos años después de repetir.
– La promoción automática permite al alumno permanecer con su grupo de edad natural y mantener las amistades.
– Aparecen problemas de socialización y autoestima: sensación de fracaso, problemas de adaptación al grupo y pérdida de amigos.
Ventajas de repetir el curso y permanecer:
– Permite al alumno adquirir madurez y corregir los errores del pasado curso escolar.
– Puede ser un estímulo para favorecer la disposición al estudio y aumentar la autoestima.
– Promocionar de curso sin alcanzar el nivel suficiente incrementa las dificultades para seguir el ritmo de la clase.
– Repetir en cursos superiores puede resultar de ayuda para que los alumnos sean más responsables de su trabajo académico.
– Los alumnos repetidores aseguran que las clases les resultan más fáciles, consiguen entender mejor la materia, hacen nuevos amigos y el profesorado les apoya conscientes de su situación.
Meu filho perdeu o ano escolar
Seu filho perdeu o ano?
Meu filho perdeu o ano escolar
Meu filho perdeu o ano escolar. Saber que seu filho foi reprovado no ano pode ser angustiante, difícil de processar e, em alguns casos, frustra seu relacionamento como pais e suas expectativas em relação a seu filho, dizem os especialistas.
O QUE FAZER SE O SEU FILHO FOR UM DOS QUE PERDEU O ANO
O que foi perdido?
“A primeira chave é entender que o ano não foi perdido, em sentido estrito, o que acontece é que o aluno vai ficar atrás dos colegas e se essa mudança for feita no idioma, vai ser possível entender que essa experiência traumática Isso irá reforçar a resiliência nas crianças e suas famílias, que é a capacidade de coletar todo o bem de qualquer situação traumática na vida e, por sua vez, fortalecer a tolerância à frustração e crise, o que será, sem dúvida, uma ferramenta para toda sua vida”. Mi hijo perdió el año escolar
Meu filho perdeu o ano escolar. Reação dos pais
Quando nossos filhos saírem do ano letivo, haverá muitos rostos tristes e pais que ficarão desapontados por saberem na escola que seus filhos perderam o ano. Mas atenção: vários especialistas coincidem em apontar que por trás de todo fracasso escolar há sempre uma razão poderosa escondida e que isso pode ir desde métodos de ensino incorretos e um ambiente familiar conflituoso até problemas auditivos ou visuais no menor.
Os especialistas argumentam que ignorar essas possibilidades e assumir posições inflexíveis pode fazer com que as crianças desenvolvam uma verdadeira fobia em relação à sala de aula.
Normalmente, a reação dos pais vem acompanhada de frases como não vou matricular você na escola de novo, é que talvez você seja um tolo, você me fez perder muito dinheiro ou você foi punido e não vai sair nessas férias.
Mas quase nunca assumem uma posição compreensiva que lhes permita explorar os motivos e encontrar alternativas para superar os problemas dos filhos.
Segundo os psicólogos, os pais dão grande importância ao intelecto e, por isso, vivenciam sentimentos de frustração e decepção nessa situação. Eles também tendem a identificar a perda de um ano como um fracasso.
Especialistas dizem que perder nem sempre é um aspecto negativo.
Para as crianças, esse fato é sinônimo de ameaças, perigos internos e sofrimento. Muitos podem não ser capazes de superar essa derrota e escolher não colocar os pés em uma escola novamente em suas vidas.
Por que eles falham? Os pais geralmente se perguntam: mas se meu filho é tão inteligente, por que ele perdeu o ano?
Por que meu filho desistiu do ano escolar?
O psicólogo espanhol Baudilio Martínez afirma que todas as crianças tendem a ter regressões periódicas e é muito comum que passem por desorganizações temporárias que as tornam mais dependentes, barulhentas, agressivas e menos receptivas às demandas escolares. Por isso, indica Martínez, é normal que em certos momentos do desenvolvimento infantil haja notas baixas e problemas em certas áreas.
No entanto, outros conselheiros asseguram que a origem da maioria dos casos está no estabelecimento de ensino.
As dificuldades das crianças geralmente estão relacionadas aos métodos de ensino. A escola não dá continuidade ao processo natural de aprendizagem com que a criança conhecia o mundo e, por isso, perde o interesse quando não entende a utilidade do que seu professor lhe ensina. Assim, concentra sua atenção nas atividades que considera importantes e não nas que a escola lhe oferece.
Outro motivo pode ser devido às dificuldades que surgem no vínculo afetivo entre professores e alunos.
Outras razões pelas quais meu filho perdeu o ano escolar
No mesmo sentido, o fracasso escolar pode ocorrer porque muitas crianças não recebem bons alicerces desde o início do ano letivo e porque há crianças que não têm a idade cronológica ou mental para determinadas séries.
Mas o clima familiar também é decisivo. A desintegração familiar, os pais superprotetores ou muito exigentes, a falta de afeto, o desinteresse absoluto dos pais pelo progresso ou dificuldades do menor ou a ameaça permanente de desintegração do casal podem ter um impacto significativo no desempenho escolar. Segundo os psicólogos, um ambiente Um membro da família com problemas pode mergulhar a criança em um estado de incerteza, confusão e angústia.
Mas também existem causas ocultas. Problemas auditivos e visuais; distúrbios emocionais; dificuldades na linguagem oral, escrita, matemática e de compreensão, que impedem o desenvolvimento normal das atividades escolares.
Recomenda-se manter a calma e o controle emoções, não recorra a insultos, ataques verbais, violência psicológica ou física
Cuidado com esses sintomas Eles dizem que é melhor evitar do que se arrepender. Bem, existem alguns indicadores que podem ajudar os pais a detectar precocemente o fracasso escolar.
No entanto, deve-se levar em consideração que todas as situações, circunstâncias e sintomas são diferentes.
Uma criança que não se sai bem nas atividades escolares não expressa sofrimento e busca todo tipo de justificativas e motivos, geralmente inadequados à realidade, para esconder seu fraco desempenho escolar.
Ele não parece estar ciente de suas dificuldades, nem mesmo sabe quais tarefas ou trabalhos tem que fazer ou como fazê-los.
Além disso, não consegue relatar suas atividades e não tenta encontrar soluções, nem exige ajuda e, se a tem, não a aceita, repetindo atitudes negativas diante de qualquer tipo de exigência proposta pelo estabelecimento de ensino.
Essa classe de crianças expressa sofrimento pelo seu desempenho, pede ajuda e é receptiva à ajuda que é oferecida.
O fato de apresentarem pequenas melhorias juntamente com as recidivas também é um indicador, ou seja, quando se percebe que o sintoma não está rigidamente estruturado, mas sim cede em determinados momentos.
O que é para ser feito?
Os especialistas coincidem em apontar que, por trás de todo fracasso escolar, há sempre uma razão poderosa oculta. Não saber disso e assumir posturas inflexíveis e agressivas pode levar a criança a se retirar permanentemente da vida escolar.
Geralmente o que preocupa a criança é a reação dos pais e não o fato de ter sido reprovada no curso. Isso pode fazer com que as crianças não assumam a responsabilidade por suas ações ou deveres.
-O primeiro passo é descobrir os motivos, tendo em conta que cada situação é diferente. O diálogo e a compreensão facilitarão este processo. Eles sempre devem ser levados a ver que seus problemas têm uma solução.
Minha atitude em relação à perda do ano escolar do meu filho
– As reprovações, censuras e castigos excessivos às vezes servem apenas para reforçar a insegurança na criança. Frases como perdi dinheiro com você, não haverá mais presente de natal ou não vou matriculá-la na escola de novo, não causam comprometimento na criança, mas maior resistência.
-Se as crianças encontrarem apoio e apoio, certamente transformarão o fracasso em sucesso. Os pais devem estar cientes de que algumas crianças requerem mais tempo para aprender. Até psicólogos indicam que há crianças que precisam passar pela experiência do fracasso para amadurecer.
-A atitude para com a criança que falha não deve ser enquadrada na severidade total ou tolerância absoluta. Nada é mais prejudicial do que a ausência de regras de conduta ou um sistema estreito que sufoca a criança.
– Uma das condições básicas para a criança enfrentar as dificuldades com sucesso é o reforço da autoestima. Se uma criança é reconhecida por suas habilidades, certamente compreenderá melhor o que é difícil para ela.
– A pensão alimentícia não deve ser baseada em elogios ou elogios falsos e infundados. O incentivo deve se concentrar em realizações reais.
Descobrindo a verdade após a perda do meu filho no ano letivo
– Os pais devem fazer com que a criança compreenda a real importância da escola, mas utilizando situações que fazem parte do seu dia a dia.
-Não é necessário, porém, insistir o tempo todo na importância da escola, ou no impacto que ela terá no seu futuro, ou no quanto seu comportamento nos fará sofrer, pois pode causar maior resistência.
– Se a causa for da instituição de ensino, recomenda-se a mudança de escola. Outro campus pode oferecer a metodologia pedagógica que a criança necessita para desenvolver seus interesses e habilidades.
– Atividades lúdicas podem ajudar a controlar inseguranças, medos e reações agressivas. Também permite que eles entendam que o sucesso não é alcançado na primeira tentativa.
-Quando a repetência ou reprovação são constantes, recomenda-se uma avaliação abrangente do ambiente familiar e escolar que cerca o aluno, com o objetivo de conhecer as reais causas e evitar o abandono escolar definitivo.
Como evitar um futuro fracasso no ano escolar do meu filho?
– Um futuro fracasso escolar pode ser evitado se a criança encontrar apoio nos pais. Você deve sempre levar em consideração mesmo a menor dificuldade que se observa no pequeno. A miopia pode causar fracasso escolar.
É fundamental que encontrem nos pais apoio para a realização dos trabalhos escolares, mas sem que eles assumam as funções de professor. Criar hábitos de estudo, buscar técnicas de aprendizagem ou ensiná-las a distribuir o tempo pode evitar futuras dores de cabeça.
Vantagens de repetir o curso
A repetição de uma nota tem demonstrado não ser uma medida eficaz para melhorar o desempenho acadêmico do aluno. No entanto, uma prática bastante difundida nos sistemas educacionais. Para que a repetição tenha um efeito positivo, é necessário que o aluno receba medidas adicionais de reforço para ajudar a aliviar as dificuldades que impediram a promoção.
A chave do sucesso está na preparação de um plano de suporte individualizado. Caso contrário, a repetição de um ano é uma punição, em que a única pessoa lesada é o aluno que perderá um ano de sua vida fazendo o mesmo que no ano anterior, geralmente sem motivação extra.
O número de repetentes cresce a cada ano em todas as escolas. O grupo de alunos que não promovem um curso aumenta significativamente no ensino médio. A conveniência de permanecer mais um ano no mesmo ano letivo tem sido motivo de polêmica entre os diversos atores da área educacional.
Os principais argumentos contra a repetição são os seguintes:
– Foi demonstrado que o desempenho dos repetentes e os resultados acadêmicos são inferiores aos necessários para a promoção ao próximo nível.
– Os repetentes tendem a se subestimar e mostrar uma atitude menos favorável em relação à escola.
– Os professores não dão mais ajuda aos alunos que não promoveram o curso.
– O resultado do aluno repetidor pode ser superior ao obtido na primeira vez que fez o curso. No entanto, eles não são estáveis ao longo do tempo e voltam a cair dois anos após a repetição.
– A promoção automática permite que o aluno permaneça com sua faixa etária natural e mantenha amizades.
– Surgem problemas de socialização e autoestima: sentimento de fracasso, problemas de adaptação ao grupo e perda de amigos.
Vantagens de repetir o curso e permanecer:
– Permite ao aluno adquirir maturidade e corrigir os erros do ano letivo anterior.
– Pode ser um estímulo para favorecer a disposição para estudar e aumentar a autoestima.
– Promover o curso sem atingir um nível suficiente aumenta as dificuldades para acompanhar a aula.
– A repetição em cursos superiores pode ajudar os alunos a serem mais responsáveis pelo seu trabalho acadêmico.
– Alunos repetentes garantem que as aulas sejam mais fáceis para eles, eles entendam melhor o assunto, fazem novos amigos e os professores os apoiam, cientes de sua situação.
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